Después del tsunami urbanizador que ha sufrido Atarfe, el equipo de gobierno municipal ha puesto sus ojos en nuevas oportunidades para los negocios privados. Todas estas nuevas actividades tienen que ver con el trasvase del dinero público al ámbito de lo privado. Ejemplo de ello, es el Centro de Día para mayores, el complejo socio-sanitario que nos prometen y las nuevas guarderías que se han creado. Para que se entienda el mecanismo de transferencia de ese dinero público a los bolsillos privados empezaremos explicando cómo se han creado y cómo funcionan las guarderías de Atarfe.
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| Nuevos negocios y a la vez limpiando su imagen |
¿Dónde se localizan las guarderías de Atarfe que dependen del Ayuntamiento?
Todas se asientan sobre suelo público, propiedad del Ayuntamiento:
-Arco Iris usa las instalaciones de un antiguo centro docente público.
-Chacolines, ocupa los bajos de un bloque de pisos. Ese suelo era dotacional y fue vendido a “Molino y Vueltas”, aunque ahí solo se debía haber construido el centro infantil. El ayuntamiento le descontó del precio de venta los bajos para la guardería.
- La Cometa, junto al Centro de Adultos se ha instalado en un solar comprado por el ayuntamiento en el casco urbano, muy reducido para esos dos equipamientos
-Chachy Guay, se estableció en la antigua biblioteca municipal, el patio se ha conseguido cercando un trozo de calle y apropiándose de ella.
-En el Colegio Jiménez Rueda, con fondos del Plan E, la empresa “Molino y Vueltas” ha construido un gimnasio para el colegio y una guardería “municipal”.
¿La distribución en el espacio es adecuada con las necesidades de la población?
Los centros infantiles no se han creado teniendo en cuenta el criterio de cercanía o de barrio más necesitado (¡Que falta hace una guardería municipal en el Barranco y la Cañada), cuatro de ellos están muy cercanos entre sí y hay muchos barrios lejanos de estos centros. Eso ha sido así porque el suelo dotacional de los nuevos desarrollos de Atarfe ha desaparecido en la reparcelación o se ha vendido ilegalmente, y los centros se han construido en suelo dotacional antiguo: patio de los colegios, antigua biblioteca o escuela… Esta localización, además de condensar y comprimir los equipamientos del pueblo tiene también otra consecuencia: algunos centros tienen poco espacio para juegos al aire libre, no reúnen los requisitos mínimos que debían cumplir.
¿Quién ha subvencionado la construcción y las obras de mejora?
Hace un mes, la Delegada de Educación prometió 600.000 euros para construir una nueva guardería en Atarfe.
Los centros infantiles que se han construido en suelo público se han levantado con fondos públicos: dinero del ayuntamiento o subvenciones que ha conseguido éste de la Junta de Andalucía.
¿Quién gestiona estos centros?
La gestión es privada, se encargan empresas privadas que han recibido la concesión del ayuntamiento de Atarfe, con algunas variantes. Las primeras las concedió el ayuntamiento sin ningún concurso público, fueron adjudicadas a dedo. Últimamente, han guardado algo las formas y han abierto licitaciones, aunque, el resultado ha sido el mismo, pues no existe en los procesos de contratación ningún tipo de control por parte de la oposición. Es un coto cerrado que impone el rodillo de la mayoría absoluta del Ayuntamiento.
¿Quién paga el funcionamiento de las guarderías?
La Junta de Andalucía subvenciona a los centros por cada niño matriculado. Los padres deben pagar si las madres no trabajan. Las familias que tienen empleo precario o en negro, no pueden acceder a ellas, aunque sean las que más lo necesiten. Cuando hemos demandado en el ayuntamiento ayudas para madres que no pueden pagar y que no pueden justificar su trabajo, nos han dicho que la ley está así y que ellos no tienen margen para admitir a esos niños, porque no ejercen control sobre los centros.
Es decir, el ayuntamiento pone los centros, en suelo público, las obras se pagan con dinero público, funcionan con dinero público y todo va a parar a manos privadas y quien decide son las empresas que las gestionan.
Si preguntas por las condiciones laborales de las trabajadoras, dejan mucho que desear: muchas horas de trabajo y salarios bajos.
¿Quién se beneficia de este negocio?
Sin duda, las empresas concesionarias: reciben un centro infantil y el dinero para que funcione. Pagan mal a sus trabajadores aunque les exijan mucho. Además, desde la Administración autonómica y local ven “legitimo” el beneficio empresarial, cuánto más beneficios y plusvalías extraigan mejor empresarios serán.
Esa proliferación de concesiones de servicios públicos a empresas privadas en Atarfe huele mal. El negocio es redondo, los servicios de atención a los ciudadanos se están convirtiendo en una enorme fuente de beneficios para algunas empresas que han visto, sin hacer nada, sin gasto alguno, un enorme filón para recibir cuantiosas transferencias del dinero dedicado al Estado del Bienestar.
Privatizar servicios públicos tiene sus consecuencias: peor calidad del servicio, encarecimiento de los costes, trabajadores mal remunerados, con empleo precario y sin derechos laborales, nulo control de la Administración.
Esta privatización ha llegado de manos de alcaldes como Víctor Sánchez y su sumiso sucesor. Izquierda Unida se ha opuesto reiteradamente a esta sangría innecesaria para las arcas municipales. Hemos propuesto el rescate de la gestión privatizada, la creación de un Patronato Público de Escuelas Infantiles en el municipio, dirigida por un Consejo con representación de los trabajadores de ese Patronato, de los padres de Alumnos y del Ayuntamiento. Esa será la mejor fórmula para que todo el dinero público revierta en los niños que van a las guarderías y en los que todavía no pueden ir. La enorme plusvalía que reciben las empresas privadas, se llevan la parte del león repercutirá en más empleo y mejor calidad del servicio. Merece lo pena intentarlo, con tu voto lo conseguiremos.
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